Las ventajas de los Pop Up Store

Son una excelente herramienta para las marcas que quieren generar factor sorpresa en sus clientes, y cada vez más estos espacios están vinculados a trasmitir distintas experiencias... y no sólo exhibir productos.

Un Pop Up Store es una tienda efímera, que se ubica durante un tiempo determinado en una zona estratégica de la ciudad. Puede ser en las calles más transitadas, dentro de un shopping, en una terminal de trenes o la playa.

La fama que están teniendo los Pop Up Store, más allá de que dura un tiempo determinado y el cliente puede encontrar en él productos exclusivos, se debe a la experiencia de marca que estas tiendas ofrecen.

Es el espacio perfecto para que el marketing sensorial sea el anfitrión del lugar, donde las imágenes, el sonido, los aromas, logran que las ventas se mezclen con el placer de tocar, oír, oler y probar. De esta manera, despertando los sentidos, logramos que los clientes se vean sumergidos en un submundo lleno de estímulos. El ingreso no es sólo con el fin de comprar, sino que es la puerta de entrada al universo de la marca.

También, los Pop Up Store son una excelente herramienta de medición, ya que los clientes en estos espacios además de vivir una experiencia de compra distinta, se vinculan con el producto de una manera que en una tienda tradicional no lo harían. Recordándolo y valorándolo mejor, porque hay un valor agregado en la vivencia de exclusividad.

En síntesis, podemos decir que los principales beneficios de un Pop Up Store son:

- Lo efímero que cautiva al consumidor.

- Son una excelente opción para vender productos exclusivos o ediciones limitadas.

- Permiten experimentar con testeos.

- Excelente terreno para el desarrollo de acciones de branding.

- Ayudan a aumentar el engagement y el vínculo emocional con la marca.

- Son "instagrameables", ideales para potenciar el contenido de las redes sociales.

- Ofrecen una experiencia distinta, innovadora, sensorial.

- Personalizadas, tiendas diseñadas acordes al consumidor y su mercado.